¿Indefensión aprendida?, ¿baja autoestima?

“Realizar la FPB fue para mí una segunda oportunidad”

Mª Luna de Torres Fernández. Orientadora del Centro.

“Las situaciones de indefensión aprendida producen tres efectos cognitivos en las personas: refuerzan la creencia de que no hay posibilidad de controlar las situaciones desagradables, producen apatía y desmotivación, por lo que se deja de intentar cambiar las cosas y afectan a los procesos de aprendizaje, porque cesan los intentos por encontrar nuevas vías de escape o de resolución”( Martín Seligman ).

¿Por qué no se escapa, si tiene la puerta abierta?

 


¿ Por qué no huye, si está atado a una estaca muy pequeña?

“Cuento del elefante encadenado”

Cuando yo era pequeño me encantaban los circos y lo que más me gustaba de los circos eran los animales. También a mí como a otros, como después me enteré, me llamaba la atención el elefante. Durante la función, la enorme bestia hacía despliegue de un peso, tamaño y fuerza descomunal… pero después de su actuación y hasta un rato antes de volver al escenario, el elefante quedaba sujeto solamente por una cadena que aprisionaba una de sus patas a una pequeña estaca clavada en el suelo.

Sin embargo, la estaca era solo un minúsculo pedazo de madera apenas enterrado unos centímetros en la tierra. Y aunque la cadena era gruesa y poderosa me parecía obvio que ese animal capaz de arrancar un árbol de cuajo con su propia fuerza, podría con facilidad, arrancar la estaca y huir. El misterio era evidente: ¿Qué lo mantenía entonces? ¿Por qué no huye?

Cuando tenía cinco o seis años y todavía confiaba en la sabiduría de los mayores, le pregunté a mi padre por el misterio del elefante. Él me contestó que el elefante no se escapaba porque estaba amaestrado. A lo que repliqué: sí esta amaestrado, ¿por qué lo encadenan? Hice la pregunta a varios mayores y no recuerdo haber recibido ninguna respuesta convincente.

Hasta que al final fui a preguntarle a mi abuelo, quien de todos los mayores recuerdo que era el más sabio. Y mi abuelo, tal como yo esperaba, me dio la respuesta que andaba buscando: El elefante del circo no escapa -me dijo- porque ha estado atado a una estaca parecida desde que era muy, muy pequeño. Cierra los ojos e imagínate al pequeño elefante recién nacido sujeto a la estaca -dijo mi abuelo. En aquel momento el elefantito empujó, tiró y sudó tratando de soltarse. Y a pesar de todo su esfuerzo no pudo. La estaca era ciertamente muy fuerte para él. Puedes ver, querido nieto, cómo seguramente muchas noches se durmió agotado y que al día siguiente volvió a probar, y también al otro y al que le seguía… Hasta que un día, un terrible día para su historia, el animal aceptó su impotencia y se resignó a su destino: estar atado irremediablemente a aquella estaca.

Así aprendí por fin que ese elefante enorme y poderoso que vemos en el circo, no escapa porque cree, pobre, que NO PUEDE. Él tiene el registro y recuerdo de su impotencia, de aquella impotencia que sintió poco después de nacer. Y lo peor es que jamás se ha vuelto a cuestionar seriamente ese registro. Jamás, jamás desde que de pequeño se dio por vencido, intentó poner a prueba su fuerza otra vez…

Todos somos un poco como ese elefante del circo: vamos por la vida atados a cientos de estacas que nos restan libertad, que limitan nuestras posibilidades. Vivimos creyendo que un montón de cosas ‘no podemos’ simplemente porque alguna vez, antes, cuando éramos niños, o incluso cuando éramos adultos pero no teníamos esa competencia o habilidad, probamos y no pudimos. Hicimos, entonces, lo del elefante, grabando en nuestro recuerdo: NO PUEDO, NO PUEDO Y NUNCA PODRÉ.

Cuando estudiaba psicología, los temas que más llamaban mi atención eran los relacionados con la Modificación de Conducta, qué nos lleva a actuar de una manera y no de otra, por qué ante el mismo reto unas personas se crecen y otras se achican, qué es lo que nos hace seguir luchando para superarnos, qué es lo que nos hace tirar la toalla, ¿Se pueden cambiar determinadas conductas?, todo este tipo de cuestiones que se veían a través de numerosos experimentos con animales y con personas, para analizar las conductas a mí me parecían sumamente interesantes.

En concreto uno de los temas que llamaban mi atención era el de “La Indefensión Aprendida”, cuando una persona llega al convencimiento de que NO PUEDE. Una vez que ha llegado a esa conclusión es muy difícil convencerla, hacerle ver que SÍ PUEDE. ¿Y por qué está convencida de que no puede?, pues porque durante mucho tiempo se lo han dicho, bien con palabras, bien con hechos, le han hecho ver que no puede, que no vale, que su esfuerzo no da resultados, y al final tira la toalla, se reafirma en el NO PUEDO.

Su autoestima está en unos niveles tan bajos que no le permite seguir luchando, ver metas más allá de las inmediatas, que vuelven a estar ligadas al NO PUEDO, ha perdido el interés porque sabe que no va a tener resultados positivos haga lo que haga (El elefante no tira de la estaca y el pájaro es incapaz de ver la puerta abierta de la jaula), prefiere no moverse, que sigan pasando los días en la misma situación, limitándose a comer, a vivir, sin intentar escapar sin buscar otras alternativas.

Aplicado al tema de la Educación hay que partir de que al ser una conducta aprendida y no innata, hay que buscar la forma para que nuestros alumnos desmotivados vuelvan a confiar en ellos mismos y sean conscientes de que esas conductas pueden ser modificadas e incluso desaprenderlas.

Para ello hay que desarrollar nuevas formas de comportamiento alternativo que les ayude a resolver sus conflictos a través de un refuerzo positivo de su autoestima y les posibilite adquirir la confianza suficiente para modificar y solucionar situaciones adversas, que desarrollen comportamientos alternativos para poder tener expectativas y experiencias positivas y sobre todo que entiendan que los cambios deben partir de ellos mismos y no del entorno.

Teniendo en cuenta todo ello, y buscando siempre herramientas adecuadas para la superación de situaciones académicas y emocionales adversas, que no han sido buscadas por el alumnado, si no que en la mayoría de los casos son circunstanciales de sus propias vivencias, familiares, escolares, traumáticas en algunos casos, etc. en el IES los Pedroches y en concreto el Departamento de Orientación, apostamos por los PCPI (Programas de Cualificación Profesional Inicial) en el curso 2010/2011, después éstos cambiaron a Formación Profesional Básica (FPB) en el curso 2014/2015 y hasta la actualidad, con el perfil de Informática de Oficina, apostamos como decía, por esa oportunidad, esa salida que podría hacer recuperar la autoestima perdida en el camino de los estudios, recuperar el interés de superación, vencer en algunos casos esa Indefensión Aprendida que podrían tener algunos de nuestros alumnos, que habían repetido algún curso, que se habían acostumbrado a llevar suspensos y por tanto veían la opción de titular muy alejada, imposible, no creían en sus posibilidades.

Y he aquí que se les ofreció una posibilidad, una opción con la que no contaban, una oportunidad para vencer la resistencia a “la estaca”, a “ver la puerta abierta”, y vaya que sí, que la aprovecharon, fue el motivo que necesitaban para superar su NO PUEDO, NO VALGO, les sirvió para constatar que SÍ PODÍAN, igual que la gran mayoría empezaron a ver otras metas, con ganas de seguir formándose, de continuar estudiando. A ello ha contribuído la profesionalidad del profesorado por el que han sido atendido, que ha sabido entender las necesidades del alumnado y darle la suficiente confianza para que pudieran concluir con éxito el programa, especialmente el profesorado técnico de Informática que aún proviniendo de otros niveles, no ha dudado en ponerse a la altura y entender las características y circunstancias del programa, empatizando con el alumnado y animándolo a continuar.

Y hoy puedo decir con orgullo que no nos equivocamos, pues recopilando datos de todos estos cursos (10 en total), vemos que por estos programas ha pasado un total de 128 alumnos, 128 alumnos que veían como algo casi inalcanzable titular, y de los que al final titularon 87, y continuaron con su formación postobligatoria, realizando Ciclos Formativos de Grado Medio 37 alumnos y enseñanzas superiores 6 de ellos, trabajando en la actualidad prácticamente todos.

Después de ponernos en contacto con la gran mayoría de ellos para que nos hablasen de su experiencia en el IES Los Pedroches y de su paso en este tipo de Ciclos Básicos nos sorprenden gratamente sus opiniones, aquí pongo algunas de ellas:

JCB, realizó el CFGM de Emergencias Sanitarias y actualmente realiza el CFGS de Imagen para el diagnóstico en medicina nuclear, ha trabajado para el SAS como celador-conductor en varias empresas de ambulancias “Mi experiencia en el PCPI fue clave para cambiar mi mentalidad, de no querer estudiar, a intentar ir cada día a más”

JC, realizó el CFGM de electromecánica de vehículos, actualmente trabaja en un taller de carrocerías, “Recuerdo mi paso por el PCPI con agrado y de forma positiva”.

CC, hizo el CFGM de Forestal y actualmente realiza el CFGS de Paisajismo rural “recuerdo positivamente la labor de los profesores y la estructura del curso”.

ME, realizó el CFGM de Informática en Hinojosa, trabaja actualmente en explotación ganadera. “Me cambió la vida e hizo que no siguiera por el mal camino”.

JJ, Empezó el CFGM de Electromecánica de vehículos, actualmente trabaja de herrero “mi formación en los Pedroches estuvo bien, aunque yo no quería estudiar“

JCD, realizó el CFGM de Informática, y actualmente estudia el CFGS de Eficiencia energética. “Una experiencia muy positiva porque además de obtener el título de FPB, obtuve el de la ESO”

IL, cursó el CFGM de Informática y después el CFGS de Robótica, actualmente trabaja montando robots de ordeño y otros sistemas automatizados, “Mi experiencia en la FPB del IES Los Pedroches fue muy positiva”

MAC, realiza un CFGM de Obras de interior, reforma y decoración en Jaén.

MMR, realiza en la actualidad el CFGM de Elaboración de Productos alimenticios y el próximo curso quiere hacer el CFGS de Cocina “Estoy muy contenta de haber estudiado en el IES los Pedroches y haber hecho la FPB”

LT, Actualmente está terminando el CFGM de Gestión Administrativa en los Salesianos y el próximo curso quiere hacer el CFGS de Educación Infantil, considera su paso por la FPB como “lo mejor que ha hecho“
EC, realizó un CFGM de cocina.

JCM, por problemas médicos tuvo que dejar de estudiar un tiempo, actualmente se encuentra realizando el CFGM de Informática en Hinojosa del Duque. Dice que su paso por el IES Los Pedroches le gustó y fue muy positivo para él.

AC, realizó el CFGM de Actividades Físico Deportivas en el Medio Natural, después un CFGS de Dirección de cocina y actualmente trabaja en un hotel de Málaga “muy buena experiencia haber realizado un PCPI, guardo buenos recuerdos”.

FAC, cursó el CFGM de Actividades físcas y actualmente trabaja como Técnico de Ciclismo en el Decathlón de Cáceres “Lo recomendaría, gracias a la FPB pude tener el título en ESO y seguir estudiando”

JC, “Es una buena opción para sacar la ESO”

MF, trabajó en Guadalinfo y actualmente en una explotación ganadera, considera estos programas como una buena oportunidad para conseguir el título.

MTP, realizó un CFGM de peluquería.

MB, está cursando el CFGM de Auxiliar de Enfermería, recomienda hacer este ciclo, porque ella gracias a eso pudo obtener el título para seguir estudiando.

JAR, Cursó el CFGM de Informática, actualmente trabaja en una empresa de telefonía en Córdoba “lo veía como un curso para fracasados, pero la verdad es que es una segunda oportunidad, me arrepiento de no haber continuado con un Ciclo Superior”

LM, estudió un CFGM de Atención a Personas Dependientes y después un CFGS de Educación Infantil, “Me hizo querer estudiar algo por fin, cuando haces prácticas aprendes mucho y le ves sentido a lo que haces”

JMS, consiguió el título del CFGM Informática, “Aprendí y me motivé, lo que te enseñan en la FPB te prepara para el Grado Medio”.

¡Enhorabuena a todos!

Por tanto y no solo en lo referente en los estudios, si no en todos los ámbitos de la vida, animamos a todos nuestros alumnos y alumnas a que se hagan estas tres preguntas e intenten obtener una respuesta, pues solo así conseguiremos avanzar y superarnos, dejar atrás los miedos que nos paralizan.

¿Cuáles son tus estacas principales?

¿Cuáles son las justificaciones o excusas que te das a ti mismo o a los demás por no hacer lo que te gustaría o lo que realmente quisieras?

¿Cómo podrías liberarte de ellas?

Han colaborado en este artículo los miembros del departamento de orientación: Francisco Legido Suárez, José Reyes Gil Rubio y Eloy Antonio Corral Pérez.