Esta mañana hemos despedido a nuestros compañeros del instituto florentino Liceo Govani Pascoli tras una semana muy intensa en la que hemos realizado una multitud de actividades con alumnos comprendidos entre los 15 y 17 años.
El lunes pasado comenzamos con un taller de dulces caseros de la mano de los miembros de la Asociación de Vecino de “La Calzá del Barrio”. Nuestro objetivo era lograr establecer un primer contacto valorando la cultura gastronómica de la zona y las relaciones intergeneracionales. El fruto resultante fue totalmente apetecible: unos sabrosos rosquillos y piñonates que nos hicieron disfrutar a todos. Mujeres sabias para las que solo tenemos palabras de agradecimiento.
Para el Ayuntamiento de Pozoblanco sólo tenemos palabras de agradecimiento, especialmente a la técnico de turismo y nuestra concejala, que tan amablemente nos ha atendido, posibilitándoles hacer un recorrido por todo el pueblo que finalizó con un recibimiento en la sala de plenos por parte de nuestro alcalde Santiago.
No hemos parado un minuto: Olipe nos abrió sus puertas gracias a Jesús; la Hermandad de la Soledad nos descubrió un mundo de emociones religiosas que se pasan de padres a hijos, gracias a Guillermo y Patricio, y acabamos en la Peña Flamenca donde disfrutamos de un gran espectáculo de guitarra y voz.
No sólo escuchamos flamenco sino que nos pusimos a bailarlo de la mano de Mari Ángeles y sus alumnos. Abanico para arriba, taconeo para abajo y un momento de paquito el chocolatero que nos hizo reír bailando. Hasta disfrutamos de una pelea de cante flamenco intergeneracional: 98 años frente a 20.
Todo un espectáculo.
Gracias a todos por compartir vuestro entusiasmo con nosotros.
Córdoba nos recibió con un sol magnífico y nuestros chicos de 1.° de Bachillerato nos permitieron revivir los rincones cordobeses con gran profesionalidad. Gracias a Don Jaime, Don Daniel y Doña Toñi.
Seguimos con días intensos como el jueves, donde conocimos una de las joyas de nuestra industria: Covap. Se merece un agradecimiento especial en nuestra aventura. Ellos han hecho ver a nuestros jóvenes la importancia de valorar lo que es nuestro, manteniendo la tradición pero sin olvidar la innovación y la economía sostenible.
Y tras esto, qué menos que una buena jamonada e ir con fuerzas para la visita a Granada y sus noches de carnaval. Solo nos quedaba ya descubrir las maravillas de Pedroche: su plaza, su torre y convento… Y por supuesto sus migas.
Y para rematar el día, otro contraste que se llevan en la retina. Algo que no acaban de comprender, porque unas palabras no bastan para transmitir lo que ellos sienten. Pero algo que les hará querer saber más de nuestra historia: la Semana Santa y esos costaleros entregados a su hermandad.
Para descansar, antes de ver el espectáculo de doma que nuestra alumna Ana y su profesor José María Garrido nos tenían preparados, nos deleitamos con unos churritos con chocolate que nos supieron a gloria. No sabéis cómo le gustan a nuestros chicos italianos. Mil gracias a nuestra profesora del ciclo de ganadería Doña Lola, que junto a sus chicos y a Antonio Moreno, nos ayudaron a descubrir en el caballo el arte y fuerza de Andalucía.
Gracias a todos los que habéis colaborado para que esta experiencia sea inolvidable. Nuestro agradecimiento a todas las familias por hacer que se sintieran en casa cada uno de ellos. Conocer otros países, otras culturas y otras vidas para aprender y valorar lo diferente.
Gracias a doña Dori Márquez por su trabajo, dedicación y entrega.
